Me encanta el 31 de diciembre; siempre ha sido mi día favorito por muchas cosas. La primera, me gusta el ambiente que hay en la calle, como de apurar algo que acaba. Me gusta todo lo que apela a la nostalgia, al tiempo pasado…soy así. No se si es vuestro caso pero además yo sí suelo hacer balance de lo que ha sido el año, sin embargo casi nunca hago listas de buenos propósitos para el año que entra. Ya la vida se encarga de que casi nunca se cumplan.
Me da mucha muchísima pena que acabe este año porque ha sido sin duda uno de los mejores de mi vida por muchos motivos. Me dan ganas de brindar al revés, por el año que termina, más que por el que comienza.
Estas son las cosas que he aprendido en 2016, que han sido muchas:
TODO SE MUEVE
Durante mucho tiempo pensé que año tras año, mi vida siempre era igual, pura monotonía pero que casi mejor, que mejor que fuera igual antes de que pasara nada malo. En realidad todo se mueve, va cambiando tan lento como el movimiento de la tierra alrededor del sol hasta que un día ese movimiento se nota bajo tus pies y todo cambia. Nosotros cambiamos también, cada cosa, cada paso, cada amor, cada tropiezo, cada polvo deja una huella que ya llevaremos encima para siempre.
SE PUEDE CAMBIAR DE VIDA
Sólo hay que hacerlo, no hay más recetas. Una de las mejores frases de la publicidad es también uno de los mejores mantras vitales que pueda existir «Just do it» o como decía el otro «levántate y anda»
LOS AMIGOS DEL TRABAJO NO SON AMIGOS
Después de pasar por dos despidos y ver la gente que me ha quedado de mis trabajos, aún llevándome bien con ellos, no os engañéis, cuando uno se va de un sitio, lo más normal es que os pase lo que a mi, que os borren hasta del Facebook pasada una semana. Los amigos están en otra parte.
NO CONVIENE HACER MUCHOS PLANES
Porque a menudo sale el tiro por la culata. Yo empecé 2016 con el que pensaba que era el hombre de mi vida y me duró dos meses más. Todo puede dar un vuelco del día a la noche incluso lo que tenemos atado y bien atado.
HAY QUE BUSCAR UN REFUGIO
Para algunos es su casa, para otros marcharse lejos, para otros una persona en concreto. Todos necesitamos una cápsula donde sentirnos felices y seguros, donde parezca que el tiempo no pasa. Un lugar-burbuja. Yo lo he encontrado este año en mi tienda. Ha sido mi novio, mi amiga, mis viajes… Mi burbuja me ha traído la felicidad que nunca tuve hasta ahora en ningún trabajo.
EL DINERO, UNA VEZ CUBIERTO LO ESENCIAL, NO IMPORTA DEMASIADO
Parece una obviedad, pero en mi caso personal, vivo exactamente igual ahora con poco dinero que antes con una nómina y quince pagas. Cuando tienes las necesidades cubiertas claro. Con poco dinero eliminas lo accesorio y te centras en lo que de verdad te importa más.
TU FAMILIA ES UN DESASTRE PERO ES TUYA
No se puede cambiar por otra así que mejor no rebelarse. Los que tenéis la suerte de tener familias estupendas, aprovechadlas. No todas son así. Las hay raras e incluso muy raras. Las hay hasta malas.
LOS SUEÑOS SE CUMPLEN
Este año también he aprendido que muchos sueños se cumplen. Cuando menos te lo esperas aparece una hada madrina o un hado padrino que te lo pone en bandeja. Nunca jamás hay que dejar de creer que todo es posible. Es que todo es posible.
EL AMOR NO LO ES TODO EN LA VIDA
El 2016 para mi ha sido el año del desamor pero aprendi que el amor no lo es todo en la vida, al menos ese tipo de amor. Hay amigos, hay viajes, hay cosas por hacer, hay otras personas que te esperan a la vuelta de cualquier esquina, hay Tinder…
ERES QUIEN ERES, NO QUIEN QUIERES SER
Supongo que conocerse es llegar a esa conclusión. A saber que si eres insegura vas a seguir siéndolo,. si tienes mala leche vas a seguir teniéndola y si no eres zen no vas a serlo por mucho que te sientes en un cojín. Comprendernos es la base para perdonarnos después Aunque no nos gustemos mucho, es que somos así.
SER AMABLE CON LOS DEMÁS TIENE EFECTO BOOMERANG
Este año también he aprendido que ser amable, agradable y atenta siempre que se pueda tiene un increíble efecto beneficioso en nuestro ánimo. Cuanto más amable eres, más amabilidad recibes y de mejor humor estás. No vale con ser bueno, también hay que parecerlo.
LA PACIENCIA ES LA CLAVE DE CASI TODO
Yo siempre lo quiero todo para ya. Follar ya, Amor ya, Exito ya, diversión ya….A veces hay que esperar, un poco, mucho…siempre. Y cuando crees que ya no puedes esperar más entonces es cuando suceden las cosas.
SIEMPRE NOS VEREMOS COMO UNOS NIÑOS
Incluso cuando tenga 90 años, creo que me seguiré sintiendo niña y me darán ganas de llamar a mamá cuando me pase algo.
O más bien, mientras siga teniendo madre, seguiré siendo una niña.
TODOS LOS DÍAS CUENTAN
Cuando trabajaba en las oficinas solo me importaban los viernes, sábados y domingos. Pero luego me di cuenta de que la semana tiene siete días, y todos cuentan, incluso los lunes.
AUNQUE TE HAYAN HECHO DAÑO, SI TE HAN HECHO FELIZ ALGUNA VEZ ASUNTO ARREGLADO
Hay que quedarse siempre con lo bueno, o eso dicen.
EL SENTIDO DEL HUMOR NOS SALVA DE TODO
Solo cuando somos capaces de ver lo patéticos, ridículos, insoportables y necios que somos a veces y somos capaces de reirnos comprendemos la verdadera dimesión de las cosas y todo se hace más leve. Nos tomamos a nosotros mismos tan en serio que no se quienes nos creemos.
Este año he tenido además la suerte de conoceros a algunos de voisotr@s los lectores de este blog lo que me ha hecho muy muy feliz. Siempre mola ver que hay alguien ahí, al otro lado de la galaxia.
El año que viene prometo abandonar estos post de psicología barata y ser más gamberra y mala.
Para el 2017 os deseo lo que me pido yo para mi todos los años: AMOR, VIAJES, AVENTURAS….
Besos de fin de año y continuad ahí, por favor que se os quiere..
🙂
Lindo fin e inicio de año.
Hola Carlota!! Me alegro por todo lo bueno q te ha pasado y si de lo malo has podido sacar algo bueno también, aunque de lo q más me alegro es por tu sueño cumplido 😀 te leo desde hace muchos años, por favor postea mássss!!! ? Feliz 2017
Feliz 2017, Carlota!!! Me encanta este post, es muy cierto. Lo de que siempre nos vemos como niñ@s es total. A mi me parece que seguimos igual que hace diez años y después ves una foto y te caes de espaldas… ejejjeje.