Todas tenemos en la cabeza los tíos de los que tenemos que huir, sin embargo a veces, -muchas- los hombres que debemos evitar a toda costa son justamente los que más nos atraen. Lo bueno y lo estándar no mola nada. Al fin y al cabo ¿para qué llevar una vida tranquila si podemos complicárnosla un poco.? Los problemillas siempre vienen bien para comernos el coco que es con lo que nosotras verdaderamente disfrutamos.

Estos son los tíos de los que yo me escapo (aunque a veces no pueda)

-Tíos a los que sólo les importa su trabajo: menudo coñazo estar con un tío que mientras cenáis está pensando en las ventas del trimestre 1, o que cuando te está follando está pensando en la reunión que tiene al día siguiente, o que cuando llevas dos horas preparando una cena te llega a las once de la noche, acelerado, hablando del curro y de mal humor. Ese tipo de tíos que no desconectan sólo merecen una cosa: que les den por el culo. Pero no tú (eso igual les gustaría y todo) otra…una becaria, por ejemplo, que así pueden seguir hablando de trabajo.

Tíos a los que sólo les interesa hacer deporte: peor aún que los anteriores porque entre tirarse por montañas. ir a correr, jugar el partido de fútbol con los amigos y hacer unos hoyitos de golf el domingo quizás le queden veinte minutillos para dedicártelos a ti y así podéis ir los dos a jugar al pádel o a hacer un cuarto y mitad de maratón.

Que no hayan tenido una pareja antes o que no hayan vivido con nadie. Cuando me encuentro gente por Tinder o similares que -pongo por caso- a los 48 años dicen no haber tenido nunca una pareja estable o nunca han vivido con una tía, me largo pitando. Una persona de esa edad que nunca ha vivido una relación no puede ser normal. Le pasa algo o en el coco o en la polla.

Los que aún viven con los padres: Amos anda, que ya no estamos para andar follando en las casas de los padres y para follar solo en las nuestras tampoco, que hay que cambiar de aires. Los que todavía viven con las mamás, dejémosles viéndo el «Sálvame» con ellas. Esos solo valen para comer tápers..de coños ni hablamos.

Tíos que nunca han salido de España: por esto deje yo a uno. A los 45 años no había tenido ni la curiosidad de ir a Portugal a ver cómo era eso del extranjero. Que se lo quede otra que tampoco haya salido así se cuecen los dos en su propia salsa española.

Tíos casados. Hay que huir pero inmediatamente. Todos sin excepción mienten. Ya sabemos las cosas que dicen: que ya no se acuestan con sus mujeres, que están a punto de separarse, que no les gusta su vida….si, si…pero ahí siguen. «Amo a mi mujer con locura pero me gustaría echarme la siesta contigo» me dijo uno hace no mucho. Hay que tener morro. Al los cinco minutos de conocerme me dijo que estaba intentando tener un bebé con su mujer y a la media hora ya estaba a punto del divorcio. Ajá. Lo bueno que esos son como los dromedarios, con un polvo tienen para estar tranquilos tres meses. Luego vuelven a la carga. Se creen que una «amante» es chungo pero que los polvos esporádicos están permitidos ….»todo el mundo lo hace» dicen.

Tíos analfabetos: suelo huir pero si están muy buenos pues no huyo. Aquí depende de cómo estén de buenos o de sus habilidades sexuales. Siempre pienso que me pueden enseñar «algo»..jardinería, a andar en bici, alguna técnica sexual, a arreglar algo….yo que se.

Tíos que te mandan fotos de sus pollas: Lo siento, pero no me gusta un pelo. Y he recibido bastantes., a muchos les da por ahí. Y creedme se puede ser muy bueno en la cama y a la vez tener algo de clase. Sobre todo me llama la atención esa gente que te dice «Hola, ¿cómo te va todo? y antes de que contestes ya te está mandando una foto de su polla..con algún comentario porno.. Se creen que por recibir eso tú ya al momento vas a estar como una perra. Se olvidan del cerebro, que también tiene que hacer click. El sexo fuera de contexto es a veces patético. La última vez que recibí una foto de esas estaba yo caminando por el arcén de una autopista de cinco carriles con mis dos hijos. Hay momentos y momentos para hacer las cosas y vale más asegurarse de  mandar las fotos cerdas en el adecuado.

Tengo un conocido que hace esto con frecuencia pero aún encima no utiliza fotos del momento, si no que tiene un set ya hecho de fotos desnudo y empalmado que va mandado a unas y otras. Ya que se hace por lo menos hacerlo al momento ¿no?

Anti tabaco y anti-alcohol: He leído por ahí choradas como «si fumas me arruinas la experiencia». Pues hijo, qué quieres que te diga, que te la arruino. Y lo de beber aún es peor. Tú jartándote a vinos y viéndole cada vez más guapo  y tu pareja a coca-colas viéndote cada vez más fea y fijándose en las tonterías que haces bajo los efectos del alcohol. No way.

Bajitos: Sí, ya se que no es importante pero no puedo con un tío que sea como yo de alto. Me parece que lo he sacado de un colegio. Eso no va a ningún lado. Un tío tiene que ser más grande y alto que tú. ¿Si no, qué nos queda ya?

Tíos con hijos: Suelo preferir a gente que no tenga hijos….y diréis qué raro teniendo tú críos. Y precisamente es por eso, ya bastante jodido es organizarte para ver a alguien cuando tienes hijos pues imaginaos cuando los hay por partida doble. Siempre es mejor buscarse a uno sin hijos que así te hace más caso.  Y una no tiene que soportar oír frases como «Mi princesa es lo primero» o «mi enana es el amor de mi vida» o «Yo por mi hija ma-to» o «No te puedo atender porque estoy jugando al Monopoly»

Tíos a los que les acaba de dejar la novia/mujer: y que todos a los veinte días dicen haberlo superado y estar superbien. Eso es mentira. Lo que quieren es desquitarse follándose a otras. Un tío recién dejado jamás se va a quedar contigo. Nunca. Y no se le ha pasado…que va. Está peor que nunca.

Los rácanos y cicateros: Uf esto me da mucha manía. Los que cuando viene la cuenta y hay que pagar te obligan a poner la mitad exacta o te cambian ellos y te devuelven las moneditas. Lo siento. Soy machista. Pero un tío que no hace el amago de pagar en la primera cita no me da buena espina.

La gente que trata mal a los camareros y a la gente que pide en la calle: Eso es ya para levantarse y marcharse. Hay muchos que tratan con condescendencia a los camareros y les hablan fatal, no digamos ya a la gente que a veces pide dinero por lo bares o terrazas. Esos, directamente, es que son unos hijos de puta.

Tíos que comen yogures, beben infusiones o no se saben tirar de cabeza: Pues qué queréis que os diga. NO.

Los que roncan: pues tampoco. Es una cosa que parece muy tonta al principio pero luego se convierte en un problemón. Además. baja la líbido. Si te despiertas con un tío que hace más ruido que un cerdo en una piara tú no quieres acostarte con ese tío, lo que quieres es ahogarle.

Los que dicen que son «románticos»…creo que esos son precisamente de los que más huyo. Esos, sin excepción, follan todos mal. Cuando un hombre destaca eso de su personalidad, hay que mirarle la bragueta inmediatamente.

Los zen, veganos, tántricos y flipados de la vida en general: Qué pe-re-za. A esos es a los que precisamente hay que decirles «Yo es que soy más de follar».

Una vez quedé con un tío a comer y cuando estábamos con el primer plato  sacó del abrigo un paquete de plástico con pan de molde sin gluten. Pero a ver…pobre, que era celiaco. Pero no comas pan, coño, no saques del bolsillo el paquete de pan Bimbo en la primera cita!!!

Los que son malos en la cama. La vida es muy corta, amiguitas. Lo mismo que no hay un minuto que perder, tampoco hay un orgasmo que perder. ¿Para qué pasarlo regulero cuando lo puedes pasar bomba? Vosotras veréis.

Cuñaos…bueno esto «va de suyo». Ya no hay ni que decir que de los cuñaos. bocazas, risitas and co hay que salir disparada. Cuando veo a un cuñao siempre pienso en la pobre cuñá que se mete en la cama con él.

Cultos pero intensos: menudo coñazo supino. Me duer-mo, me a-bu-rro

Y diréis..pero bueno ¿quién queda? Pues alguno habrá…alguno que no tenga nada de esto y que aunque lo tenga, te de igual porque te compensa con creces con alguna otra habilidad.

Podéis añadir alguno, si veis que tal…..